Una de las preguntas que se hace la gente cuando se topa con los productos de agricultura ecológica es si son demasiado caros. Y como creo que este asunto es de gran interés, voy a intentar responder de forma clara por qué creo que sí merece la pena comprar productos ecológicos aunque no sean baratos.
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¿Qué son los productos ecológicos?
Para poder entender cuál es la definición de los productos ecológicos es muy importante entender su inseparable vinculación con la agricultura ecológica. En este tipo de sistema de producción agrícola, se trata de respetar el medio mediante el uso adecuado y sostenible de los recursos que nos brinda la naturaleza. Así, se evita por completo el uso de sustancias químicas sintéticas o la modificación genética, tanto para cultivar la tierra, como para abonarla o, por supuesto, para luchar contra las plagas que pudieran atacar, logrando productos más nutritivos y saludables sin sustancias perjudiciales.
Y no solo se trata de eso, sino que también se busca con la agricultura ecológica tener un impacto positivo en todos los eslabones de la cadena de producción, ya sean las comunidades productoras o el medio ambiente.
El etiquetado ecológico
Cabe destacar que estos productos están regulados en la Unión Europea, de forma que el uso de las palabras orgánico, biológico o ecológico se rigen por reglamentos específicos, así como los prefijos eco- y bio-.
¿Merece la pena pagar más por los productos ecológicos?
La respuesta a esta pregunta es muy relativa. Tanto, que para responderla habría que tener en cuenta las condiciones económicas del comprador, su conciencia ambiental y social o la importancia que le den a la salud. Pero para no andarme con rodeos, voy a «osar» responder a la pregunta: sí, merecen la pena los productos ecológicos. Y para ello, voy a darte unos datos muy básicos sobre la agricultura convencional.
La agricultura convencional o, más bien, industrial
- Cosechas de peor calidad: la agricultura tradicional busca tener mayor producción de peor calidad mediante semillas híbridas. Esto se debe a la llegada de la industrialización, la cual «obliga» a producir alimentos en cantidades altas.
- Alimentos menos nutritivos: la consecuencia es que los alimentos tienen menos vitaminas y minerales porque las plantas absorben menos nutrientes del suelo. Además, los alimentos pasan mucho tiempo almacenados, con lo que pierden nutrientes.
- Empeora la calidad del suelo: debido al uso de pesticidas, productos fitosanitarios o no respetar los ciclos de cultivo.
6 motivos para comprar productos ecológicos
- Tienen un 30 % mayor de nutrientes: esto te ayudará a tener una mejor salud y, a la larga, es posible que ahorres dinero en tratamientos médicos.
- Uso de pesticidas naturales: los cuales respetan el medio y no introducen productos químicos en nuestro organismo.
- Cosechas menores pero de mayor calidad: dado que se respeta el tiempo óptimo de maduración de los alimentos.
- Suelos más ricos: que permiten que las plantas absorban más nutrientes.
- Se respeta la rotación de los cultivos: esto ayudará a que los suelos se mantengan fértiles y no se sobrexploten.
- Corto tiempo de almacenamiento de los alimentos: lo que redunda en la calidad de los alimentos.
Entonces, ¿es importante todo esto para ti? Normalmente, las personas suelen ser escépticas de los fenómenos que no ven claramente con sus propios ojos, aunque actúen a la sombra. Es un poco parecido a lo que pasa con la relación entre los alimentos y la salud.
Ahora es el momento de que valores tus prioridades (dinero, salud, etc.) y tomes la decisión de comprar productos ecológicos, o no, que mejorarán tu salud a medio y largo plazo.