Añadir los copos de avena en un bol, cuenco o plato profundo.
Añadir, en un ladito, las cucharadas de levadura de cerveza al gusto, pueden ser más o menos.
Añadir las pasas. Yo prefiero las moscatel, pero eso es cuestión de gusto.
Añadir el aceite de lino y remover bien con la avena para que ésta quede bien hidratada. A mayor cantidad de aceite, menos seca queda la avena y es más fácil de comer.
Después de mezclar el lino con la avena, lo mezclamos con la levadura de cerveza y con las pasas.
Ahora, picamos fina la verdura, el pepino y el pimiento rojo y los añadimos a nuestro plato. Estos ayudarán también a hidratar la avena, lo que hace más fácil su ingestión.
Añadir las semillas de cáñamo.
Remover bien y servir. ¡Ya esta! Ya tenemos nuestro desayuno vegano listo.